Era domingo en la mañana
Venia despertando la casa
Había bajado los pies al suelo
Y el frío penetraba entre mis dedos
Subiendo por cada cm de mi cuerpo
Camine hacia mi ventana
Para sentir el aire fresco en mi cara
Al abrirla entro un férreo viento
Sacudió la habitación
Y me despabiló el pensamiento
Mire en la revolcada habitación
Una foto que del ropero cayó
Eras tú y tus largas pestañas
Sonrientes me miraban
De blancos dientes reías
Hacías parecer más grande tu sonrisa
Tus cachetes regordetes
Apachurraban tus ojitos cafecitos
Y pareciás un feliz chinito
Ojalá pudiera meterme en esa foto
Recuerdo bien ese día
En la playa mahahual te contemplaba
Tras de ti una hermosa agua salada
Y la brisa de mar en tu cara
¡Oh! si yo tuviera una nueva oportunidad ahí
Hubiera dejado de lado la cámara
No estaría capturando el momento
detrás de un lente ahora obsoleto
Lo grabaría en las yemas de mis dedos
Grabaría la resequedad de tus jugosos labios
Grabaría tus nudillos secos y ásperos
Grabaría tu mirada nuez en mi retina
Y tus largas piernas en pasos junto a las mías
Tu voz también la grabaría
Tus palabras serían un disco en mi cabeza
Que pondría cuando mi ser sienta tristeza
Y volver a la alegría con tu voz hecha melodía
También guardaría en una botella
Poquito de tu esencia caribeña
Y después al mar la aventaría
Y por todos los mares andaría
Con la esperanza encontrar algo de ti
Hasta cualquier atalaya subiría
Pero la realidad es que no estas
Y solo tengo el eco de una foto de ti en el mar
Un minuto de gloria entre mis manos
una gota que hidrata mi mejilla
Solo eso y nada más
No hay mas que tu ausencia en la tierra y en el mar
En el cielo o en la ciudad tampoco te he de encontrar
Pues fuiste la estrella fugas que me vino a regocijar
Y se fue sin poderte tocar siquiera una vez mas.