En cada noche, al amor florece,
la oscuridad del cielo con tus ojos,
la humedad de tu boca con el viento,
la lluvia de tus besos estremece,
es el tiempo de soltar a los despojos,
del ayer, que amargan el pensamiento.
En el sillón, que se convierte en cama,
donde por fin, después de tantos meses,
el virginal silencio nos encuentre,
aunque no hay luz, tu presencia es flama,
hoy, como en el pasado, tantas veces,
cuando el baile es el músculo del vientre.
Y las flores perladas de tu cara,
humedecen más los besos que te doy,
los brazos, rejas del amor nos atan,
tan cerca los dos, nada nos separa,
ente vellocidades de tu piel estoy,
sombras en movimiento nos delatan.
El poeta del amor. 25-09-16.
Cabo San Lucas, BCS. México.