José Antonio Vilela Medina

LA IRONÍA DE LA PLUMA Y EL PAPEL

Debajo de su almohada

un papel y una pluma,

y extendió su mano a la diestra de la cama

vacío encontró el lugar que antes ocupado

estaba.

 

Su rostro mustio y famélico

daban cuenta de los días

transcurridos en la penumbra

de aquel cuarto ya desordenado

y oscuro.

 

 

 

Se fue sin decir nada

se fue sin dejar nada

se fue y no quedo ni su

aroma de piel,

se fue quizá en esa mañana,

se fue y solo él sabe que debajo

de su almohada un papel y

una pluma.

 

 Irónico fue lo que ella me dejo,

escribir de ella en este papel

con la pluma, sus befas, sus denuestos,

no vale la pena, mejor dejarlo en blanco

que el tiempo marchite el papel, y seque

la tinta de la pluma.

 

Estéril está tú espíritu y seca tú alma

rezuma en tu rostro la tristeza, y a pesar

de todo debajo de la almohada una

pluma y un papel.