Tú me provocas
Me provocas al mirarte
la más inmensa pasión.
Me provocas que me quede
en cada espacio de tu cuerpo.
Me provocas me desnude
de mis miedos y temores
y sin pudores me deslicé
en el vientre de tus ganas
y al calor del vino…
levantemos nuestras copas
con mil promesas de amor.
Dejemos que la vida nos lleve
a no dejar espacios vacíos
donde se gozan los cuerpos
por placer y por amor.
Dejemos pasar el tiempo
envueltos en deseos
dejemos que el vino se deslice
en cada espacio de la piel,
nos emborrache suavemente
y nos provoque a amarnos
en un encuentro de dos almas
y de dos cuerpos con sed,
de apagar sus ansias.
Y el amor estremecer
entre cantos de alegría,
demostrándonos amor
llenos de ardiente pasión.
Dejemos que el tiempo corra,
abrazados al placer
que nos provoca querernos.
Tus labios en mis labios
inquietantes y apasionados,
sé que quieres apagar la sed,
en la piel de mis deseos.
Tú me provocas a amarte
con tu voz dulce y suave,
y tu mirada penetrante
desnudándome las ganas
de abrazarme a tu cuerpo
en provocativo encuentro,
sintiendo el latir de dos cuerpos enredados
en deseos, deseos que tú provocas amándonos.
Alicia Pérez Hernández… México
No es la pluma la que escribe, es el alma
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