ENTONCES SÍ.
(Blanes, Costa Brava, años setenta)
Entonces, sí: abajo penetra el mar,
acompaña con cantos los alegres
rostros que asoman por la playa.
Puede darse: el fenómeno del sol
transgrede las sombras de los arqueados
pinos de la cala, y el suave rumor de la brisa
penetra despacio desparramándose,
haciendo de lo suyo un susurro,
un clamoroso rumor de emociones.
Estuve en la playa. Llegué solitario
al romper el alba, sintiendo de inmediato
el pronunciado oleaje, la agitada marejada,
la salida del sol, el sabor a salitre embriagándome
de aire y yodo el desnudo cuerpo.
Estremeciéndome en los brazos de las olas,
dibujé luego –mariposas de agua, telar
imaginario de lo efímero-, el prodigioso
mar mediterráneo.
DESDE EL FONDO Cuaderno V. Desde el 4 de octubre de 1978 al 27 de julio de 1980
©Teo Revilla Bravo.