Flor Erendira

Memorias de un noviembre.

Recuerdo abrir los ojos y a mi alrededor mucha gente

Todos querían que estuviera bien, me preguntaban frecuentemente

Las voces eran ecos en mi cabeza, había muchas luces fuertes

El frío más recóndito e inhumano me recorría el cuerpo gravemente

 

Como si el mundo estuviera de acuerdo conmigo

Ese día se puso negro, lluvioso y frío

La soledad era una señora que parada me miraba

Estaba en un rincón del inhóspito frío que me acompañaba

 

Ella muy prudente no se acercaba

Sola en su plan directamente me miraba

La verdad no me importaba cuanto me miraba

Como me importaba el mensaje que mandaba

 

¿Tú en dónde estabas?

¿Por qué la soledad me acompañaba?

Preguntaba y todos con lastima me miraban

¿Por qué simplemente no me decían dónde estabas?

 

Fuiste hace dos años justamente

Fuiste la poesía de un poema fusionado

Fuiste magia que no cabía en mi mente

Fuiste un sueño del cual me despertaron bruscamente.

 

Flor Hdez. México.