Reyshell Mendez

DESNUDA

Cuando me desnudas con los ojos cerrados,  bebiendo mi ser en cada poro de mi cuerpo descubierto, así como el agua entra entre  paredes, te sumerges en mi desnudez derribando todo con el calor de nuestras pieles, traspasando los límites de mis copos duros, abriendo todas las puertas para que me adivines me tomes me poseas, haciéndome sentir un palpitar de un diminuto corazón entre mis piernas, con tu respiración y la calidez de tu lengua que lame mi piel dulce, saboreando sorbo a sorbo mi sudor, deleitando con tus  dedos mi geografía ardiente, me nutres con cada beso que siente mi cuerpo desvestido, cuando junto a las sombras entre gemidos los deseos me llaman, puedo escuchar el placer de alaridos de una batalla en la cama, tanto placer cabe en una copa vecina de tu lengua, perfecto bajo mi cuerpo más cabal que mi sombra, viviendo el placer de amarnos a oscuras donde tentas mi cuerpo como un ciego queriendo dibujar mi textura, con cada caricia que exploran las ganas, humedeciendo mi llano en gotas de lluvia que saborea tus labios en los caminos de mi llanura…

El día en que me muera deseo que me entierré desnuda, para poder sentir las caricias de la tierra y está pueda besar mi cuerpo despojado de vestiduras, así como sentí nacer de nuevo con tu lengua en medio de mis piernas, que por un instante de excitación me hicieron sentir que estaba muerta, alcanzando el gozo de la gloria cuando lloviendo mi fluidez tibia empapaba tu traviesa boca…