Esteban Mario Couceyro

Mujer

Mujer, que sueño en vigilia

sos esquiva a mi alcance

mas no puedes, por voluntad

separarte de mi deseo.

Mujer, que vas delante

mil caras has de tener

y en una sola boca

te me brindarás.

Y en el abismo insondable del beso

me perderé sin remedio

y de eso, saldré en maravilla

como reluciente lucero.

Capaz de gran osadía

el talle, sujetaré

y me sumergiré, en tus ojos

en busca de mágicos tesoros.

Con ellos adornaré

tu cuerpo de mujer

y en la frente colocaré

la estrella amanecida.

Si esto no fuese suficiente

te daría sin reservas

todos, hasta el último

de mis efímeros latidos.