Y mi subconsciente no evitaba pensar lo que me temía,
Eran solo inquietudes de un muchacho;
Alguien que cree elevarse cada tanto.
¿Cómo justificar al confesar tus más oscuros vicios
Al cura de la iglesia?
Que no se preocupe, no más.
hora de buscarse una solución eficaz.
Alguien suele pensar eso también, pensé.
Pero luego están los costos de oportunidad
Que con cualquier decisión que tome
Siempre pierdo algo igual
No puedo comprar tiempo, pensé.
A veces mi mente inconsciente
Se cambia, revela y des controla
Dependiendo que tome, Inhale o esnife.
Y si me encuentro boca arriba
Impotente con un rifle
Al frente de esta noche infinita.
¿Se aclararía mi mente finita?
Sólo me pregunte:
¿Quién me pensó?
Es imaginarme como Él
Tendría un parecido conmigo mismo
Conociéndome cada día,
Nada de ilusiones ni charlatanerías;
Dios es una experiencia de vida
Pensé. Finalmente.
Dios se muestra al que lo quiere ver,
Y así vuelvo a tener fe en Él.