Era al final de la madrugada,
y me tiré a un abismo sin fondo,
yo, ante la parca no me escondo,
ni le tengo miedo a la nada.
Mientras iba cayendo gruté con alegría,
!Viva siempre la vida!
lo único que nadie olvida,
iba hundiéndome y nació un nuevo día.
¿Donde están los amores,
en el campo o en la ciudad,
suspirarán por alguien o algo?
¿Me esperan nuevos horrores,
serán la gloria o el infierno verdad?
lo cierto, es que no sé si entro o salgo.