Mi pequeño amor
tantas veces mis manos
los besos
todo yo
he cubierto esta piel deseada.
Te he amado
con el orden de un calendario
cuidando en un principio
que nazcas en primavera
en delicados brazos
que me aferraron
en la flor de esa boca
nacida en besos.
En el estío
pródiga tu cintura
creó la vida
y el universo todo
fue nuestro
tus cántaros alimentaron
los amaneceres
con gorjeos de crianza
y manos muy pequeñas
te enmarcaban el rostro.
El tiempo fue pasando
como un péndulo
exacto del destino
día a día tus besos
y los míos
hicieron el cielo
y los pájaros otoñales
que aparecían
después de cada lluvia.
Paso tanto tiempo ya
la vida fluye como un río
a nuestro lado
el invierno va despojando
el paisaje de nuestras vidas
y nos inunda lentamente
el atardecer en la mirada.
Nos hemos amado
con el misterio de la naturaleza
a veces me pregunto
por qué
y cuando miro tus ojos
en el reflejo de la ventana
comprendo por qué te amo tanto.