Edmundo Rodriguez

VIDA , QUE EXQUISITA ERES

Querida Mìa , 

cuando la noche me arropa , 

entras a mi despacho , 

con tu seda en el cuerpo , 

y dos copas de vino . 

 

Te acomodas frente a mi , 

y tu fragancia exquisita , 

y seductora atrapa mi atenciòn . 

 

Acaricio ,

tus aterciopelados muslos , 

y el besarlos , 

no lo puedo evitar . 

 

Ya tus ojos , 

estàn llenos de placer .

 

Nuestros corazones , 

se dejan ir , 

en el aroma del vino , 

que nos hacen sonreìr . 

 

Y se vacìa la primera copa , 

y tu càlida mano , 

se apresura , 

y sirve otra . 

 

El canto del fondo , 

nos hace seguirlo , 

y tu silueta , 

que se me acerca , 

me encumbra las emociones . 

 

Y la noche se alarga , 

como la vida misma , 

que me està haciendo gozar , 

tu compañìa . 

 

Querida mìa , 

tu seda flota , 

y yo , 

te entrego mi amor . 

 

Y el vino , 

aromatiza ,

nuestros interminables besos . 

 

Las liras del cielo , 

nos acompañan ,

aquì en este , 

imperecedero momento . 

 

Vida , que exquisita eres .