Perdona...sin querer herí en la roca
y en lugar de agua saltó sangre
y sentí miedo y fuí cobarde ante
el grito salvaje que rompía el alma.
Perdona si en mi loca carrera me detuvé un momento
y al notar tu sonrisa quise parar el tiempo
sin ver que tu por dentro sin lágrimas llorabas.
Perdona si te hice daño con mi loco deseo
desbocando el caballo de pasiones del cuerpo
arrancado a la rosa sus mejores pétalos.
Perdona...ya no volveré a besar tus bellos labios,
ni a gozar tu hermoso cuerpo.
Tu sigue tu camino con mi adiós...
Yo estoy frenado en lucha a muerte con el tiempo.
Hay en las cumbres tocando el cielo
un aroma de besos.
En las planicies junto a los pinos
un rumor de suspiros.
Y en la llanura junto a ese rio
recuerdos tuyos y recuerdos mios.
J.C.