De verdad, eres la razón
de encontrar el farol
en los sueños con tormentos.
Cuando no hay salida en la destrucción,
tu luz me ilumina el alma.
Llegando a mi pequeña morada,
calmas todos los desastres
qué hay en mí rebelde alma.
Real, sueño, ilusión, todo.
Me enterneces con tu luminosidad,
aplacas los rincones de soledad.
De mí no espero nada,
de ti espero todo; lo imposible,
la utopía de mis sueños de infancia,
podría cumplirse gracias a la libertad
qué con tu inspiración me regalas.
Temple de acero en tu complejo cuerpo.
Un laberinto eh encontrado en tu piel,
ahora quiero vivir perdido en el.
Descubrir cada recoveco trazado
vivir en él, por los infinitos, enamorado.
Realmente hay en tu esencia, un aura de amor,
te rodeada. En tus encantos no hay temor.
La soledad huye de tus cualidades,
pues al pensarte siempre, hay alguien qué
en mi rincón del mundo me acompañe.
Contigo eh creado un universo imperfecto,
dónde todo gira alrededor de tu afecto.
Los versos qué inspiras en mi son por ti.
Cada palabras es pará lo sublime
qué en tus pensamientos puedo sentir.