Izandro

COMPARTÍ DE TI CADA SILENCIO

 

COMPARTÍ DE TI CADA SILENCIO,

Y DE TU VOZ, TODA CALLADA PALABRA,

APRENDÍ A RESPIRAR DE TU MISMO ALIENTO,

Y A BEBER DE LA SAVIA DE TU PRECIADA ALMA,

ME ALIMENTE DE LA CARNE QUE ME DABAS,

CUANDO APRETABA EN MÍ, LA PENA CANSADA,

Y SOSTUVISTE EN PIE TODO MI CUERPO,

CUANDO LA VIDA CRUEL ME APRISIONABA.

 

APRENDÍ DE TU MÚSICA Y DE TUS RISAS,

PARA ADOPTARLAS COMO SI FUERAN MIS MELODÍAS,

Y DIBUJÉ SOBRE MI PIEL LÍNEAS CANSADAS,

PARA APRENDER AMOR DE TI,

MIENTRAS ME HABLABAS.

 

TE OBSERVE CALLADO CUANDO REÍAS,

Y PERSEGUÍ EL AROMA QUE TÚ DEJABAS,

COMO SI FUERA UN RASTRO DE AMBROSÍA,

Y COMO SÍ FUERA YO, LA NOTA QUE TÚ CANTABAS.

 

ME CELÉ DEL VIENTO QUE MECÍA TUS CABELLOS,

Y TAMBIÉN DEL SOL, QUE BRONCÉO TU PIEL DESNUDA,

Y CELÉ A LA BRISA, QUE A TUS LABIOS DULCEMENTE HUMEDECÍA,

Y ASÍ TAMBIÉN, CON LA LUNA QUE DE TI SE ENAMORABA.

 

SOY PALABRA HECHA POEMA EN TUS LABIOS,

Y LUZ DEL SOL QUE ENTRÓ POR TU VENTANA,

SOY EL HOMBRE QUE APRENDIÓ QUE TUS MIRADAS,

ME HABLAN DE AMOR, CUANDO DESPIERTO EN LAS MAÑANAS.

 

Y ME PREGUNTAS AÚN ¿QUE POR QUE TE QUIERO?

TE DIRÉ QUE TE AMARÍA,

A PESAR DE TODO…

A PESAR DEL TIEMPO.