Tú me has estado deseando
De verano calidez embriagante
en el cuerpo nos penetra a los dos.
Y voy sintiendo acomodo en tu carne
porque tú me has estado deseando.
Y se han besado tu cuerpo y mi cuerpo
y se escuchan los jadeos unidos.
Poco a poco en el lecho van muy juntos
los paganos y profanos deseos.
Y aquella ternura tejida en sueños
que ahora está convertida en encuentro
brillos de luna recoge en tus ojos
y agitadas las miradas se besan.
Y hay un poema colgado en tus labios
deshojando con pasión los sentidos
que nuestras vidas marcará por siempre
con recuerdos de momentos vividos.