Voy impulsando tu vida, no te detengas.
Vamos hijo, que luchar esta en todo ser.
No tengas miedo que no hay mas huella
vacía como la que jamás se verá nacer.
Afirma fuerza de avanzar hacia delante
con corazón, paciencia, tesón, esperanza
porque ese reino, el de tus ojos brillantes,
será un presente firme pisando el mañana.
Vamos hijo, que tienes todas las fuerzas,
mis alas nunca tu vida van a abandonar;
enciende en ti la llama de esa luz nueva
que en la oscuridad tu alma así irradiará.
No cedas porque el camino aún es largo
pero aquí está tu padre desde la eternidad
bendiciendo cada mañana todos tus pasos
para que sepas en tu vida él siempre estará.