GANAS DE VIVIR
( día de batalla contra el cancer de mama)
Mis hijos ignoraban que ocurría
pero un mal invadía ya mis venas,
me tragué sin dudar todas las penas
y escondí todo el miedo que tenía.
A mi lado, un buen hombre me quería,
y llorábamos juntos en las cenas,
dos amantes de treinta años apenas
que se hacían de noche compañía.
Peleé como nadie por los míos,
no podía dejarlos a su suerte,
yo era muy joven y ellos unos críos.
Escapé de las garras de la muerte,
y prometí a mis nuevos desafíos
agarrarme a la vida ¡muy muy fuerte!.