gerardo villalobos

Romance en la Madrugada

 

No me canso de mirarte

Sigilosa cuando duermes

Mientras descifro el enigma

De tu piel blanca y solemne

Descubrirte en el misterio

De un sueño vago y reciente

Es lo que anhelo esta noche

De madrugada silente

 

Que linda te ves dormida

Impecable en tu relieve

Mi brazo que bate y tiembla

En mi cabeza sostiene

El temor de las distancias

De la mañana siguiente

Porque te miro sabiendo

Que te me vas para siempre

 

Amor que pronto te marchas

Para no volver a verme

Dejadme que lo acaricie

Tu pelo que el viento mece

Soñad que sueño contigo

Y susurro lentamente

Si así te quiero dormida

Imagina cuando despiertes

 

Con un rumor de gaviotas

Se aproxima el viento inerme

Y la voz del mar levanta

Ritmos de canto ausente

Se mimetiza una inmensa

Luz de amor en el poniente

Cuando se estrellan mis olas

En el cantil de tu vientre

 

En el menguante vocablo

De tu espíritu celeste

Descubres que la mañana

Semblante pálido tiene

Opaca la luna llora

Y en la luz desaparece

Del amanecer que trunca

Este idilio de tenerte

 

En el blancor de mi paño

Tu dulce olor permanece

Y el celaje de tu cuerpo

Confundido siento a veces

Distinguirlo entre las sombras

De la llama cuando crece

En mi hoguera que te invoca

Jugueteando en la paredes

 

Y al anhelarte en plegarias

La luna bate y se pierde

Ha de temerle al adiós

Porque el rumor de los peces

Le revelan murmurando

Que la tarde cuando llueve

Ese adiós huele a tu cuerpo

Y al mirarme se conmueve

 

El frío prisma de insomnes

Colores nocturnos breves

Ya no quiebran mi descanso

Pero ay ! mujer, como duele

El ayuno de tus besos

El hambre que reverdece

Al exilio de mirarte

Tan hermosa cuando duermes

 

Gerardo Villalobos