Sugestivo caminar, pasos que buscan fuego;
felino su estilo maulla zapatear escondido;
meneo tentador despierta animal reprimido;
desterrado de lógica, me someto a tu juego.
Inocencia de ángel exteriorizas parpadeando,
aura de esta presencia que me anega alegría;
ese instante posándote desnuda me sonreías,
tu humanidad elegida quería te siga besando.
Regentas tu encanto por el precio prohibido,
paga exigua te son mis palabras cazadoras;
tabú es el firmamento de tus alas voladoras
acabando en nubes el accionar corrompido.
Curvas dibujadas por los dedos sin limitación
interpretan el lenguaje profano del erotismo;
mezcla celestial y del infierno, fatal adicción,
los gemidos invitan a explorar tu feminismo.
Venus de Milo, majestuoso cuerpo me hechiza,
reina estatua viviente cual diosa del paraíso;
envidioso le resulta al rostro de la Mona Lisa,
por desear el efecto de tus labios enfermizos.
Morbo candente apresa en cada sentido mío,
una obscuridad sexual mutando mi dialéctica;
arrojándome a tu mundo sin mínimo albedrío,
te vivo religiosamente, bella visión profética.