JUAN STARS

De Beqa, La luz de la Mañana al Padre

En un lugar apartado de todo

perdido más allá del horizonte,

dejando todo lo que un día fui

el interactuar ha huido de mí.

 

Aislado de todo lo bueno

excepto de lo único, el pensamiento,

mi nombre era: Beqa and Delushion

mejor conocido como Luzbel.

 

Los que se decían ser mis hermanos

en la inmensidad por hojas en los bosques

y aún mi padre ya no me llamán así.

 

He huido de aquel enfoque dejando mí

lucidez, siguiendo el sendero corto

apartándome del momento aquel.

 

Del lugar más agobiante aquella

la divina estancia, que contrasta

mi ser profundo, la insalubre condena.

 

Al escuchar descarnados insultos,

el proseguir boca brutal alguna

tachando mi hermoso nombre ¡acusadores!

 

En ocasiones permanezco arrimado

a muchos árboles espectadores,

susurrando cosas los egoístas

escondiendo la belleza de mí.

 

Secando y pudriendo sus hojas

marchitándolas como al verme venir.

 

No digamos aquellos a los cuales

me arrimo con fatiga, despojaron

sus ropas al viento sus desnudos

cuerpos, negando a mis ojos el placer.

 

De contemplar la envoltura aquella,

que se hace llamar perfecta sabiendo

que no verán belleza alguna

como la mía en cualquier parte.

 

Ahora me doy cuenta de tu engaño,

como el que creó tal ser maravilloso

se equivocaba y no previene tal fracaso,

con tu innegable poder no has acertado,

 

¿Por qué tal mal que a tus hijos persigue

no lo has evitado?  Acaso es un plan,

una visión, el futuro de los mismos.

 

¿Pero qué plan sería el que unos cuantos

se perdiesen por el bienestar de otros?

 

Si es este tal caso que ha de dejar

por perdidos a tantos, por unos pocos

a causa de tus errores, o más bien

la desigualdad de tus sentimientos.

 

¿Cómo puede haber un corazón

que se dice ser perfecto tener

preferencia para con sus hijos?

 

Te escondes detrás de tus pretextos,

por libertad de albedrío nos acusas,

maldiciendo a los seres imperfectos,

habiendo puesto tú esas formas tan injustas.

 

¿Por qué os has puesto tal malicie?

de no haberlo hecho el caso otro fuese,

ahora nos maldices y nos castigas

con tus fuerzas de extremo a extremo.

 

Dándonos a conocer tu fiero brazo

a tu parecer con gran justicia

y nos consumes a tal dolor y tal

desgracia, del dolor que tú no sientes.

 

Te dices llamar de amor completo,

con tal corazón que nada sientes

¿Cómo puedes llamarte amor perfecto?

¡Que no vez nada! Y todavía mientes.

 

Me has herido tanto qué

¿Cómo sostenerme en pie?

Si con dificultad lo consigo.

 

¿Cómo decirte que te amo?

Si sólo odio puedo sentir,

pues seguir no me deja

el dolor que me has causado.

 

Atormentado, mi mente

que sólo busca el recuerdo

el maravilloso aquel

 

¿Cómo al mismo tiempo

puede uno, llorar y reír?

Al ver tus ojos el momento

el que por terminado fue.

 

¿Cómo expresar con palabras

este dolor que me agobia

y no acaba conmigo de una vez?

 

No logro comprender que mal

te habré hecho, para que a tal

cruel castigo me condenes.

 

correr de nada me ha servido,

pues el dolor atrás no se queda,

buscando siempre a donde huir

y siempre me sale al paso.