Prendido el amor en fuego
de entre enormes llamaradas
surgen brotes de sosiego
con gran deseo mezcladas.
Van brotando con tal fuerza
en dos almas enamoradas,
medran firmes y enlazadas
sin que nada las retuerza
Lindo amor que de un otoño
y en ese fuego insaciable
torna solo e imborrable
como infancia de un retoño.
Frío viento o tempestades
que a la llama hacen se avive
mas lo único que consiguen
es desechar fatalidades.
Enormes llamas las de amor
que en el fuego se consumen
y al deseo en su esplendor
con fuerza y fervor asumen.
Ya se convierta ese fuego
en una hoguera tranquila
que con mimos y caricias
sus suaves llamas se avivan.
Y ahora solamente queda
el rescoldo de ese ardor
que por poder mantenerlo
hay que darle mucho amor.
¡Puedes llama de amor inmenso!
perder la fuerza enseguida,
pero ese amor que tan propenso
tiende a durar toda la vida.
Y es si sabemos preservar
el fuego que dentro queda
que en sí el amor perdurará
siempre dentro de esa hoguera.
\"El rescoldo del amor
es para toda la vida.
Tú dale cariño y calor
y veras como se aviva\".
SSM.