Nacer como una estrella,
como algo que no se espera,
fuiste siempre mujer sincera,
y luz que siempre destella.
Estaba como barca extraviada,
había perdido la memoria,
ya no sabía que era la gloria,
hasta que por ti me fue regalada.
El sol sale para todos,
y el aire nos despierta,
y nace del niño la risa.
Estos son nuestros modos,
la felicidad es tan cierta,
como esta fresca brisa.