Laura Schez Godoy

Bienvenido al mundo

Alégrate,
pequeño,
porque has llegado a la vida.
Aún no desatan tus ojos inciertos
el color de sus pupilas,
ni se dibuja en tu boca
una inocente sonrisa.
Aún no te mueves consciente,
ni respiras meditando.

Tu mirada irreflexiva estudia
lo que hay a cada lado
de los brazos que te arrullan
y te protegen con mantos.
Tu piel,
es tersa y nueva,
tu corazón
limpio y casto.

El niño predilecto en primavera,
destinado, tal vez, a sembrar cariño,
Chupete, sonajero, nana...¡espera!.
¡Al paso del poema ya ha crecido!.

Agarra los barrotes de la cuna
el viaje de la vida va sin frenos.
Sonríe en tu andador,
disfruta.
No llores de dolor si caes al suelo.
Ríete, sé tú, discurre y siente...
pues no hay nada mejor que tu principio.

En este inicio ya, ¿qué más decirte?
Bienvenido al mundo, buen amigo.