En tus versos se siente el tierno encanto
de gaviota que vuela por la altura,
son las notas que llevan la dulzura
que nos quitan pesar y desencanto
Cada letra que escribes es un manto
que nos cubre de penas y amargura
van repletos de dulce y gran ternura
con el lustre de bella flor de acanto.
Son tus rimas las nubes celestiales
que parece que son de terciopelo,
con sus luces de estrellas siderales
nos despiertan del alma grande anhelo,
porque llevan del río los caudales
que nos hacen vivir un bello cielo.
Autor: Aníbal Rodríguez.