LUIS ADONAY VENEGAS LEYTON

El amor crecerá contemplando el agua

El amor crecerá contemplando el agua

 

La lluvia

 No importa donde, solo contemplarla

cuando simplemente cae silenciosa

como llovizna o gota

descolgándose de su nube madre

que la deja y se aleja

para ir a otros lares

donde aportar amor y humedad vida

para otros que con ansiedad  esperan

sus caricias....

 

Las vertientes

 Naciendo como pequeños besos

desde el fondo de las entrañas de la tierra

juega alegre la vertiente verde

entre fango y musgo

entre raíz y hierva

beso y besos de amor

se van sumando entusiasmados

los pequeños hilillos de agua

para tejer los campos

con red de amores llenos de vida...

 

Los ríos

 Brazos y abrazos de los ríos inquietos

son los cuerpos  de las aguas

que se unen como eslabones

de una gran cadena

o cuentas  de  cristales transparentes

de un rosario eterno

que suman vida en cada paso

por pueblos y ciudades

por montañas, tierras lecho

donde florecerá la vida nueva

y la semilla será la base del

sustento humano..

 

 Los mares

 Será el juego de los mares

que haciendo galopar sus olas

harán que sus aguas abracen y se alejen

como juego eterno repetido

entre arena, orilla y agua esquiva

que asustada se aleja de la playa

que con sus pequeños granos de arena

le aprisiona y la consume

como beso de amor

donde se entrega el alma

sin compromisos,

donde se entrega la vida

y se sella el amor como amor eterno

que se mostró en esta vida y se apostó

a seguirlo en la otra existencia

en la otra vida...

Sin estar seguro de que ella exista.