Del dedo el huracán
Como del ojo la ausencia
Las imágenes sin registro
Cuando la memoria solicita
Olvidar lo soñado
Que ahora se llaman dejavús
Sueño con la muerte
Del insólito durmiente
Cuando lo siente en su presente
Una barca de suspiros zarpan de tu boca
Y la memoria medita
Entre bullicios de un silencio ensordecedor
Las patas del gato sangrientas y mal humorado
Te tiende un boleto falso de ayuda
Que en tus más humildes sueños
Te rozaran con su cola.