Todo un mundo en pleno desarrollo solo es posible a travès de todos y cada uno de sus habitantes, cada quien juega un papel con estereotìpos predeterminados, de una sociedad que vive el amor entre la guerra y la paz.
Ahora se pregunta asì misma: -¿y cuando serà a mi manera?, estoy cansada, agotada, ya basta de hacer solo lo que otros esperan de mi, a partir de este momento soy natural y original equilibrando la balanza entre el bien y el mal.Rosmery nuevamente sumida en sus pensamientos, sueña con un mundo diferente. Y es asì como reinicia el programa de su propia vida, en la resistencia de un mundo creado en un ambiente que se debate entre la guerra y la paz.
-Rosmery porque te cuesta tanto seguir instrucciones, es fàcil, difìcil no es, cuando vas a entender que vives en una sociedad y si perteneces a ella debes seguir un patròn que marca normas de conductas que establecen el orden y permiten organizarnos debidamente, caso contrario el caos es inminente, ¿que es lo que tienes en contra?
-Si yo estoy bien mi entorno tambièn lo estarà, asì que no se tratà de ir en contra de nada, mas bien es ir a favor de la naturaleza del ser, es vivir y dejar vivir, integrarte a un sistema para sobrevivir no significa que tengas que ser parte de su rebaño y cual oveja obedecer, el asunto es dejar fluir el ser que cada quien lleva por dentro, en la claridad absoluta de que todo aquel que hace bien o mal inevitablemente en el espejo que le ofrece la vida su resultado obtendrà.
Y ambas amigas caminan senderos diferentes, mientras Rosmery se revela a todo un sistema creado, siendo objeto de crìticas por tener una vida propia, Yuli sigue al pie de la letra las normas y conductas establecidas en la sociedad, ganando el respeto de todo el rebaño que al igual que ella vive una vida prestada. Mientras tanto la vida continua su curso con sus mas y sus menos, es el caso de Rosmery y Yuli como el de muchos otros el que viene a nuestro relato.
y la vida continua...