CANTOS A MÍ MISMO
(¡Y A LOS CIMEROS MAESTROS…
QUE ME PRECEDIERON!)
Soneto Sáfico
Inflama el numen mío tu recuerdo,
Francisco, el De Quevedo y buen Villegas;
las perlas no se hicieron para el cerdo...
¡dejé contigo yo de andar a ciegas!
Jamás si eres mi brújula me pierdo,
me consta a quien te lee no le niegas
estar en comunión y mutuo acuerdo...
¡el alma en letras bellas nos entregas!
Allá en tu España fuiste faro regio,
dejaste tú al barroco en alta cima...
¡por ello para siempre sos egregio!
Lo dice aquí el poeta que te estima:
¡milito con orgullo en el colegio...
allí en el cual tu sabia pluma, prima!
JAIME IGNACIO JARAMILLO CORRALES
Condorandino