Cuando pasas en la tarde caminando
en la brisa vas dejando una caricia
que yo intento atrapar entre mis manos
pero es en vano, se me escapa cada día
y te alejas con tu paso apresurado
no me dejas que camine a tu lado
y no puedo convencerte que me gustas
eres injusta, me rechazas de antemano
mas, si una tarde ya no vuelves a pasar
seguramente algo en mí va a reaccionar
desde ese día a esperar no volveré
y en mi ventana la persiana cerraré
y la cortina por completo correré.
Cuando pasas en la tarde cenicienta
de gris plomizo el cielo va cargado
yo me siento, como siente el que se sienta
a esperar el tren que viene retrasado
y te alejas dejando el aire perfumado
de jazmines, azahares y más esencias
vas jugando con la edad de la inocencia
y yo, indefenso, intento ser todo un versado
mas, si una tarde se te olvida la rutina
de caminar entre colgantes bambalinas
seguramente algo en mí verá el desaire
y en mi ventana la persiana hará el detalle
y la cortina correré de espaldas a la calle.