Hoy he pensado mucho en ti,
soñé que estaba entre tus brazos
que me besabas apasionadamente
y que tu cuerpo se unía al mío.
Pero muy pronto desperté,
había una lágrima en mi rostro
que me decía: “En ti esta la felicidad".
Pero esa lágrima no entiende que sin ti,
mi vida no es igual,
pues a tu lado yo he llorado siendo feliz
y en mi silencio grito por no tenerte.
Me digo a mi misma,
que si una lágrima se escapa
es porque ya en el corazón
no cabe tanto dolor.
Y así en mis labios terminó,
suspirando y pronunciando tu nombre.
Y mis lágrimas brotaron, y al pensarte,
tu recuerdo, me tranquilizó.
Y sólo espero que algún día tú vuelvas a mi,
que la vida es solitaria sin ti,
pues a tu lado yo he llorado siendo feliz
y ahora lo hago, porque no estás junto a mi.