Los valores se entrelazan en la actividad humana
cada uno, en la acción diaria, anuncia su presencia
la honestidad es la punta que guía la caravana
el eslabón primario que sostiene la conciencia
Llegar a ser honesto en la actuación constante
es una máxima de quien se respete a sí mismo
de aquel que se estime como ser relevante
demostrando en su accionar que no hay egoísmo
se es honesto para enaltecer la condición deseada
y para mirarse en el espejo de manera frontal
y no volver la vista por la imagen formada
cuando nos alejamos del principio ideal
la honestidad señala un comportamiento definido
en el trabajo diario, donde el hombre se esmera
la paga, producto del esfuerzo sereno y sostenido
debe ir a sus manos envuelta en sensación de seda.