Cuando falta el aliento, cuando miras y no ves el firmamento.
Cuando las puertas se cierran aún sin haber tocado.
Cuando la respiración se acelera porque falta el aliento.
Cuando el caminar se hace cuesta arriba y te asalta el tormento.
Cuando solo te resta estar en silencio y derramar lágrimas a escondidas.
Solo en esos momentos es cuando se prueba la nobleza del alma. Su profundidad, su fe, su entereza y su temperamento.
No es fácil dar aliento cuando dentro te ahoga el desespero, pero por ti lo haré amor. Por ti seré fuerte. Ambos estamos en esta barca que pasa ahora a través de la tormenta y ambos saldremos a flote, venceremos. Abrázame fuerte, no estás perdida, no todo está perdido y si así lo fuere, estamos los dos, tú a mi lado, yo al lado tuyo y ambos renaceremos.
Tu eres mi fuerza y una de las razones de mi existir. Dame tu mano y aunque temas recuerda que aquí estoy y te amo. Juntos en las alegrías, juntos en las penas, juntos para siempre …..