Con un beso intenso, abróchame a tu boca
con un fuerte abrazo, adhiéreme a tu cuerpo
transfúndeme tu aliento, viérteme tu respiración
cíñeme a tu desnudez, fórmame tu horma.
Destruyamos el hastío
la frustración de nuestro ansío
de todo lo que quisimos y nunca pudimos
cumplamos este idilio, de tu cuerpo sobre el mío.
Nuestras miradas gritan fuerte
nuestras manos deseosas nos llaman
nuestras sonrisas murmuran caricias
mi piel erizada la tuya aclama.
Ven acércate suavemente
muéstrame el presente
pero hazlo eternamente.