Te escribo por hacer la prueba
por sacarme esta pasión devoradora
por decirte lo que tanto siento
y saciar esta sed abrasadora
te escribo con ganas de no hacerlo
porque sé que ante ti estoy inerme
porque el dolor se me viene de golpe
y no tengo cómo defenderme
Se que un día, cuando pueda hacerlo,
te veré pidiendo que regrese
pero siempre será lo que parece
Una historia de amor y sufrimiento
una renuncia y un arrepentimiento
un destino de rabia y de contento.