Pablo S

Te arrancaron de mí

Te esperaba contento, suplicando tus besos

La mañana olía a esperanza y ternura

Sin aviso morimos, silenciados y presos

Vi sus garras manchar tu impecable blancura

 

Sin piedad, los maté, triturando sus huesos

Supliqué tu regreso, me atrapó la locura

Te lloré sin parar y me hundí en los excesos

Ni la sangre de ellos revivió tu dulzura

 

Preferí terminar mi dolor y mi vida

Yo morí a tu lado la mañana de abril

Que te vi agonizar y te supe perdida

 

Decidí escribir el poema febril

Que tus ojos contemplan, mi más triste partida

Un pedazo de mí que dejé en un atril

                             **E**