Han transcurrido seis meses
¿Han sido tantos?
no sé medir este tiempo.
Se me fue, como se va la niebla
con la llegada del amanecer.
¿Qué esencia emites, para fijarte en mí?
te fuiste colando tan suavemente
como la luz que penetra por las rendijas
de las puertas viejas de goznes y aldabas
de casa solariegas pueblerinas.
Pero, hay una diferencia,
mientras esa luz se aleja con el paso de la tarde
tú, te quedas conmigo.
Así transcurran todas las horas del día,
te quedas conmigo, vas conmigo,
en todo este tiempo, en este soplo de vida terrenal,
en este diminuto momento universal.
Siempre habremos de completar y renovar el ciclo,
porque nace y cierra cada día,
para seguir haciéndolo en todos los siguientes
seis meses de toda nuestra existencia. Y más allá, creo.