Tú me hablaste dulcemente
Y yo en silencio te sonreí
Y todo en mi rededor sonrió
Y la vida entre aromas corrió.
El mundo se hizo bonito
Y problemas ya no hubo
Las flores cantaban abiertas
Y todo el mundo sonrió.
Las nubes que negras estaban
Ya no están
El sol que se había escondido
Allí está
Ya no hubo brisa ni viento
Ni frío ni calor ya sentí
Todo estaba lleno de encanto
Sólo estaba tu voz.
Lima, 16 de nov. Del 2016