¿Renacerá el cantar entre las cosas
con notas melodiosas
desde el trino del ave alborozada?
¿Encenderá la vida aletargada
un sol de madrugada
y abrirán los capullos de las rosas?
¿Serán brincos de luz las mariposas
en vuelo, majestuosas,
rodeando a la niña enamorada?
Los versos de mi mente ilusionada
¿Harán de su almohada
un nido de caricias primorosas?
Dime tú si blanquea ya el ciruelo,
si las flores que adornan la cornisa
aroman ya la brisa,
si hay nubes de algodón surcando el cielo.
Dime si es primavera el nuevo velo,
que tengo una mirada que se agrisa
en su ausente sonrisa
y en la pupila amarga del desvelo.
Derechos reservados por Ruben Maldonado.
(Publicado el 22/09/2012, fotografía de Silvia B. Calderón)
El soneto doble o soneto doblado es una variante del soneto clásico que consiste en añadir un verso heptasílabo tras cada verso impar de los cuartetos (1º,3º,5º,7º) y otro tras el segundo de cada terceto (10º y 13º), con lo que el poema resultante tiene, en lugar de los catorce versos canónicos, veinte: catorce endecasílabos y seis heptasílabos (Wikipedia).