Hoy amanecí con llenarte de mi,
agótame, sacrifícame, pídeme,
recógeme, abrázame que quiero ser tuyo
a toda hora.
Soy el que paso saltando por las escaleras
por el pasillo, por el frente de tu casa
soñandote.
Quiero salir de mi alma
y entrar en la tuya.
Mi corazón gime, arde por ti
hasta aullo en luna llena
y te canto en mi soledad.
Mi alma no callará, gritará, llorará y gemiría
a los cuatro vientos que te ama.
Aun así, sigo soñandote.