Las suaves sábanas desprenden un dulce olor a nosotros,
Pero tú ya no estás para darme calor.
El silencio acrecenta la soledad en la oscuridad de nuestro antiguo cuarto,
Donde me hallo yo,
Rota y vacía,
Como una botella de whiski que un borracho ha tirado contra la pared.
Hace frío ahí afuera y estoy triste pensando en nosotros.
Triste porque te has ido, triste por la certeza de que nunca volverás.
Triste.