El dolor de aquel amor,
es más fuerte que cuando se oculta el sol,
una lágrima desapareció
el viento la secó
fue el Invierno frió que la abrazo,
porque un gran ser no retornó;
No acaba de comprender:
porque desistió a su amor
que por ella insistió
y afirmó:
que posiblemente se cansó
porque jamás le permitió
apoderarse de su lesionado corazón.
Pero se equivocó
¡así lo admito yo!
pues solo él la auxilió,
concediéndole la felicidad
de volver a intentar
y recordar que puede volver amar;
jamás imaginó
que la muerte se entrometió,
pues un arma blanca lo apuñaló.
y dicen que en su ultimo aliento
pronuncio:
“nací para amarte yo”
Hoy una Historia empieza,
mas me quebranto de dolor,
al ver aquel suspiro sin control.
Admito que cada invierno
un lazo de recuerdo
le quitan su aliento;
Mas trata de engañar a su alma
afirmando:
“que se reserva en sentimiento”;
Sin embargo aun no acepta
por que la muerte a él lo señaló,
“y ante sus amigos demuestra que nada paso”
Un grito silencioso la quebranta,
y aunque quiera maquillar su sollozar,
no resiste
porque se desborda por su mejilla
“una lágrima fría”
al escuchar aquella música
que todos los días él se la repetía:
“Y ME SIENTO TRISTE AL SABER
QUE TU JAMAS ME CORRESPONDERAS
ENTONCES QUE CAIGA LA LLUVIA
COMO LÁGRIMAS DE MI CORAZON”
Frase que poco a poco los unía.
Pero que la muerte los separó
Sin antes poder confesar
que aceptaba corresponder
a su incondicional amor….