Ya un rojo...
se nos despierta impúber,
entre lagos de fragancia
entristecida,
entre nostalgias
apenas beso
se nos anuda...
entre tristezas
de herido labio...
se nos despeña.
(campos ennoblecidos
en su delirio,
en el archipiélago
de los amantes...
que a veces sueña ).