Era por la tarde…Llovía…
Laura salía a hurtadillas de la habitación;esa habitación que tanto la incomodaba y a la que inevitablemente debía entrar día tras día…
Laura dejó la charola en la isla de la cocina mientras ponía la comida intacta y fría de los platos en pequeños recipientes plásticos que irían de vuelta al refrigerador;el sonido de una auto aparcando en el jardín la distrajo de su labor…
Con una urgencia descomunal Laura se apresuró hacia la entrada de aquella enorme casa y se sintió victoriosa al abrir la puerta antes de que la mujer rubia y delgada que se encontraba fuera pusiera siquiera su uña en el timbre…
-Sofía,hermana-dijo Laura casi en un susurro-haz llegado-cansada y ofuscada la pelirroja de ojos verdes se dejó caer en los brazos de la visitante.
-Vall,que…
-Shhh,habla bajito-le interrumpió su hermana-no quiero que despierte.
-¿Por qué?-cuestionó Sofía-¿es muy malo cuándo está despierta?
-Yo no diría malo,yo diría más bien tétrico.
El sonido de un portazo llamó la atención de las hermanas que súbitamente interrumpieron el abrazo…
Del auto descendía un hombre delgado de cabello negro que parecía tener la misma edad de Sofía.
-¿Qué pasa?¿Todo está bien?-cuestionó el hombre al tiempo que colocaba una sombrilla sobre la cabeza de Sofía.
-Sí,sólo entremos,por cierto Laura,hermana mía,él es Cristopher,mi novio.
-Muy bien,entren-la pelirroja cerró la puerta con un silencio excesivo.
Cristopher se sorprendió al observar la casa,por dentro era mucho más grande, casi apostaba que su auto y el de Sofía cabían en la sala…
A simple vista aquel lugar parecía una casa más de una zona residencial:piso de duela,elegantes candelabros ,fotografías familiares enmaracadas que más bien parecían pinturas,una sala enorme con su respectiva enorme pantalla;parecía más bien la casa de cualquier rico respetado,pero lo que más desconcertaba al novio de la hermana mayor era el ambiente que allí se respiraba…
-¿Desde cuándo pasa?-preguntó Sofía.
-Hace un par de días.
-¿Y por qué no me avisaste nada?-cuestionó la hermana mayor indignada
-Quize hacerlo,pero no contestabas la llamadas y,para ser honesta,no sabía si podría localizarte
-¿Por qué?
-¡Nunca estás disponible!-dijo la menor.
-Eso es por que trabajo-debatió la mayor
-¡Yo también!
-Ah,¿sí?
-Claro,no es como que tu pagarás la hipoteca recién murió Papá-exclamó Laura.
-Y ahora vas a reclamarme eso,¿no?No me fui por que quisielo,no soportaba el dolor.
-Por favor,dile eso a quién te crea,a él por ejemplo-Laura señaló a Cristopher que miraba intrigado al grupo de personas que aguardaban en silencio en el cuarto comedor-yo sé que te fuiste por qué jamás haz sabido comprometerte,me dejaste en ésta casona,sola con Mamá y sus depresiones.
-Sí soy tan inútil¿por qué me llamaste?Cómo sea ya están los refuerzos aquí,¿o no?¿Ó para qué los llamaste?-exclamó Sofía indignada.
-Por qué son los únicos que conocen a Mamá más que tu y yo-contestó Laura.
-Muy bien,entonces me largo-replicó Sofía.
-Algo muy difícil para ti-se burló Laura dispuesta a entrar al cuarto comedor.
-Amm,oigan-el tono quebrado de Cristopher interrumpió el andar de las hermanas.
Ambas se giraron hacía el pasillo que daba a las habitaciones,en dónde una mujer madura de cabello corto,rizado y negro se encontraba innerte;con la mirada pérdida y ambas manos apretando fuertemente los costados de su blusón para dormir…
Cristopher miraba casi hechizado a la mujer que pronto se encontró perdido en esoso ojos negros que miraban al vacío,cuyas pupilas se dilataban y relajaban intermitentemente;escuchaba su respiración,que más que eso parecía un jadeo y,tarde se dio cuenta que ya estaba en su hogar,solo,lejos de esa cas,esa mujer…
Y lejos de Sofía…
-Mami-decía Laura a la mujer mientras Sofía seguía pensando en la indignación que sentía por la uhída de su novio-necesito que te quedes aquí con Sofía,¿sí?Yo no me tardo,sólo voy un momento al comedor.
-¿Qué?No,no quiero quedarme sola con ella-refutó la rubia.
-Por favor,necesito hablar con ellos-rogó la pelirroja.
.Cómo si los tíos fueran a decirte algo.
-Por favor.
-No,no me siento cómoda-insistió Sofía.
-Bien,como sea no sirves para nada-la menor se acercó a su Madre que sentada en el sofá seguía con la mirada pérdida-Mami,ven quiero que veas cuánta gente ha venido a visitarte,¿vamos al comedor?
Lentamente y sin mirar a su hija la mujer se levantó,tomada del brazo de Laura,y avanzó con parsimonia equiparable sólo a la de alguien que camina a encontrarse con la muerte…
En el cuarto comedor las reacciones fueron variadas:la Tía Gaby casi escupe,la tía Alicia dejó caer la taza al suelo,el tío Rafael abandonó la casa al primer intentó,la prima Alejandra se abrazó a su esposo y la prima Sol se abrazó a su Madre que intentaba barrer los pedazos de la taza con el pie,el Tío Miguel sólo observaba…
-Lamento la espera-se excuso Laura-es esto de lo que hablaba¿habían visto algo asó?-la pelirroja sentó cuidadosamente a su Madre en un pequeño sofá junto a la entrada del cuarto comedor-ya han venido a verla tres Docotores,un Psiquiatra y un Sacerdote;nada funciona,y estoy desesperada-Laura intentó disismular su llanto.
-Pues yo no había visto nada así-dijo la Tía Alicia-y honestamente no creo que sea un mal de familia,ya nos habríamos enterado.
-No podemos saber con certeza eso,Tía-dijo la prima Alejandra-a veces saltan generaciones.
-¿Quiere decir que mis hijos podrían verse así en algún momento?-cuestionó la prima Sol,preocupada.
-Tal vez tengamos que hacernos estudios clínicos todos-dijo la Tía Gabriela.
-¿Estudios de qué?-preguntó Sofía recargada en el marco de la puerta.
-De todo-contestó la prima Alejandra-es mejor…
-¡Oigan!-gritó Laura-luego nos preocupamos por los laboratorios y eso,¿pueden ayudarme con esto?-la pelirroja señaló a su Madre que no había cambiado de su posición original.
-Yo sé algo-intervino el Tío Miguel,callando el barullo.
-¿Qué sabes?-preguntó la Tía Alicia
-¿Recuerdan el verano del 63?¿Cuándo Mamá me envió a ayudar a la Tía-abuela Genoveva por que estaba muy enferma?
-Claro-contestó la Tía Alicia
-Te envidiábamos,creíamos que harías fiestas en esa enorme alberca-exclamó la Tía Gabriela.
-Mamá me envió a esa casa con la esperanza de que Genovevva la considerara en su testamento,que cómo sabemos,no fue así-el Tío Miguel suspiró para luego dar un último sorbo a su café,ya frío-cuándo llegué a ala casa todo estaba en silencio,hasta creí que me había equivocado de casa;no parecía haber gente viviendo allí;entré a su habitación y ahí estaba,recostada boca arriba y con los ojos hacía el techo,pensé que estaba muerta;iba a correr para avisarle a Mamá,entonces oí eso-Miguel señaló a su hermana que jadeaba fuertemente-y fue tan extraño,la revisé,estaba sucia,la bañe…
-Espera,espera.interrumpió la prima Alejandra-¿mo llamaste a nadie para que la ayudara?
-¡Claro que lo hize!Todos se negaron,incluyendo a Mamá,por alguna razón siempre me colgaban el teléfono o me cerraban la puerta en la cara,apuesto a que los Doctores te dijeron que lo que mi hermana tiene es un estado catatónico demabulante,¿no Laura?
-¿Cómo sabes Tío?-exclamó Laura
-He hecho mi tarea-el Tío Miguel guiñó un ojo.
-Claro,con tanta herencia,¿Qué más te quedaría por hacer?-insinuó Gabriela.
-Basta,no salgas otra vez con eso;en fin,no tiene arreglo,cualquier profesional o no profesional te dirá eso sobrina-Miguel tocó el hombro de sus obrina fraternalmente.
-Tío¿qué le paso a tu Tía Genoveva?-cuestionó Sol.
-No sé cuántos días llevaba sin comer pero,sólo digamos que llegué solamente para acompañarla en sus últimos días.
-Qué horrible-Alejandra se abrazó a su esposo.
-¿Entonces?-cuestionó Laura esperanzada.
Quiería una respuesta,una solución;las palabras mágicas “todo estará bien”,pero lo único que recibió fue la imagen de su Tío observando a su Mdre con detenimiento,imagen que ayudó sólo a acrecentar su ira y frustración…
Era tarde…Llovía…
Laura lloraba para sí;quería correr,uhir del lugar y del problema,uhir de su madre,sentía la increíble necesidad de correr y no parar…
Sintió una mirada pesada que interrumpió sus pensamientos…
La esperanza la inundó…
Era su Madre…
Ignorando a todos los presentes la Madre de Laura observaba a su hija fijamente,parecía leer su mente…
Súbitam,ente el rostro de la Madre de Laura pasó a ser el de la misma Laura;ésta visión la horrorizó…
Se miraba a sí misma con tanta rabia que era casi palpable,su imagen la aterrorizaba de manera tal que la dejaba inerte,atornillada en el suelo,ignorando por completo su entorno…
Era tarde…Llovía…
El cuarto comedor de aquella casa estaba cubierto de sangre y restos humanos…
Laura sentada al centro de la mesa,intentaba no observar a su madre caminar por las paredes…
…Gäiä NäMäaH De jüffcK0R…
04_11_2015