Si cada vez que siento el infortunio…
Si cada vez que arrecia el temporal…
Si cada vez que truena la tormenta
o aprieta con tesón la adversidad.
No puedo arrinconarme en una esquina
llenándome de angustia o ansiedad,
dejándome abatir por la tristeza
con sentimiento de infelicidad.
Disforia emocional desarreglada
que intento combatir con energía,
por eso pongo garra en la contienda
y nervio con la lucha cada día.
No admitiré, trastornos que me amarguen,
y aguantaré
los golpes que me puedan asestar
y si la edad, ablanda mi corteza,
también sabré llegar con dignidad.
Y aceptaré, la vida como venga
viviendo sin congoja ni tristeza
sabiendo que en la fiel naturaleza
soy fruta con tendencia a madurar.
Cecilio Navarro P.
24/11/2016