argantonio

Hablar del fin del mundo

Hablar del fin del mundo,

demuestra pocas ganas de vivir,

no comprender que no se goza sin sufrir,

y que lo hermoso sucede a lo inmundo.

 

En un desierto sin una sombra,

nace por sorpresa un ser vivo,

desaparecido tiempo ha del archivo,

donde no existe lo que no se nombra.

 

Encontrar una rosa sola,

en un olvidado solar,

es esperar un nublado en verano.

 

Es como un mar sin una ola,

es como ganar siempre al juego del azar,

o abrazar al enemigo, llamándolo hermano.