ÉRASE UNA VEZ...un joven corazón que amaba con pasión intensa sin ser ,jamás ,correspondido por parte del ser amado
Todo su amor ,que era inmenso,chocaba , una y otra vez con un muro espeso y gélido siendo incapaz de traspasarlo y se refractaba en multitud de motas de polvo de hielo , diluyéndose en el aire escarchado y desapareciendo en un profundo abismo negro y sin salida
Aquel corazón ardiente sòlo palpaba oscuridad, silencio, y comenzó a morir lentamente , rodeado de una frialdad turbadora, en una soledad terrible, ante la impasibilidad de tantos corazones amigos
Y siguió desvaneciéndose , hasta que se le paró la vida
Se había hecho minúsculo , apenas le cabían sentimientos , no quería arder nunca más ni seguir sufriendo
Y se fabricó una coraza para hacerse duro , para defenderse ,para hacerse inmune al amor , al dolor, .... para no perder el escaso calor que le quedaba , para no morir del todo en la helada soledad .
Ya no amaba, pero no le dolía .
Ya no ardía, pero ya no lloraba
Sentía frío , pero seguía viviendo…….
Y se preguntaba una y mil veces, por qué no podía recibir parte del amor que tanto había prodigado, por qué otros corazones se unían y él no encontraba ninguno que respondiese a su llamada...
Pero comprendió que era más insoportable el aislamiento que se había impuesto que el sufrimiento de no ser correspondido , y decidió despojarse de la coraza y mostrarse al mundo tal cual era.
Continuó chocándose con más muros gélidos y espesos , hasta que una noche de verano , y casi sin darse cuenta se apoyò en otro corazón y penetró en él.
Y colorín colorado………este cuento se ha acabado