FHER77

ConmociĆ³n

 

Recuerdo tantas ocasiones juntos,

El inagotable manantial de tu sonrisa,

Mi sentir volaba prendido a tu alma,

La imposibilidad se doblegaba.

 

La inevitable claridad fue quién reveló tu ausencia,

Aniquiló con su presencia el sueño que viví,

Sometió a mí cuerpo al azul frío de la soledad,

En vano luché contra la inminente realidad.

  

Grite con voz dolosa y fracturada,  

Pero el efecto fue siempre inane,

Deambulé por senderos cuya oquedad lastima,

Efímera encontraba tu presencia en objetos.

 

Mutilaría el tiempo y su incesante andar,

Si con ello garantizara prolongar tu compañía,

Juró que lastimaría de gravedad a la distancia,

¡Sin dudar me declararía culpable y egoísta!

 

¡Tonto y más tonto! por no disfrutarte más,

Por permitir que las horas pasarán sin sentido,

Porque anhelo la irrecuperable e irrenunciable vida a tu lado,

Agoniza toda bondad en mí… y es mi tragedia.

 

Llenarme de tu luz, beber de tu boca los besos,

Que curan mis pausados y constantes tormentos,

¡Santo Dios! a tí te pido de ser posible,

Libérame de este cuerpo de muerte.

 

He pactado con la muerte un buen trato,

Renunciación total a la vida,

Si con ello consigo tenerte por siempre,

Si con ello vuelvo a sentirme vivo.