Romance claro, castellano
30 de noviembre : (1957-2018).
60 años de matrimonio
—80 de vida— de los
Hermanos franciscanos,
Amparito y Rafael Mérida
Escrito era nuestro encuentro
naces para ser amada,
nuestra vida es estar juntos
así escribió Dios con calma
ya son cincuenta y nueve años
de apretar tu mano blanca
deja huella mía, otra tuya,
y no nos separa nada.
cual pareja sostenemos
no cavilan tus miradas
muchos años y recuerdos
que infunde, PAZ, tu mirada
es presente todavía
lo que el cielo en ti derrama
si bajo ese mismo techo
festejamos su alborada
la sentimos compañera
y vemos, de DIOS su cara.
regalo y misericordia
testimonio del que ama.
Tu mano aprieta la mía
a tu derredor el ángel
el que siempre nos cuidara
cual vela encendida, Inmácula,
das a mí tu pensamiento,
con tu sonrisa me basta
es mi pecho solo tuyo
las disputas moderadas
lo que piensas yo lo intuyo,
es amor, cuando bien se ama.
Al caer las grises sombras
lentamente, sosegadas
do presentí tu sonrisa
clara fuente de esperanza,
en borrarlas como brisa
serenidad que te hermana.
siempre sales a mi encuentro,
como hijo que torna a casa
fuente de pureza escrita,
al fresco de madrugada,
el alimento, el trabajo
que guardado en la almohada
envía sin anunciarse
con tu calma acostumbrada.
Cual soplo, tu beso es viento
que engrandece tu palabra,
sucesivo beso tuyo
es estrofa perfumada
donde se encarnó Amparito
animosa, dulce humana.
que con tu acento enamora
y hermosura sobrepasa,
Feliz divise su campo
bajo ese cielo de plata
atento escuche su voz
y galante escuche su alma,
sin arrebato el aliento
con la frente descansada
su voz suena a letanía,
por ser bella la cristiana.
Hoy humildemente altiva
era hermosa la muchacha,
flor entre floridas flores
cupido envío su lanza
llena de mejores versos
en ambos ánimos clava
juramos por eso amarnos
entrambos por bien, casar
Con mi mejor poesía
gorrión ave enamorada.
avanzan, dos ilusiones
la vida es una, no pasa
Fuiste en el cielo escogida
por tu medio el SEÑOR me habla
testimonio es su presencia
bendecida, bien ganada
setecientos ocho meses
es mi historia, no patraña
estos cincuenta y nueve años
la felicidad, no engaña.
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Dr. Rafael Mérida Cruz-Lascano. OFS
Guatemala, C. A.