Entre amigos me cobijo
llegamos al recuerdo de la perdición
pero nunca alcanzamos la ambición
solo disfrutamos la lectura del corazón.
Vasos llenos de alcohol como salida
palabras que terminan siendo suicidas
afectos calmados por el tiempo
nuestra voces siempre se difuman en el viento.
Fragmentamos cada simple momento
en vicios sádicamente nuevos
esos instantes se convierten en unión
la parte de la amistad que nos traslada a la comunión.
Tomaremos el último trago
para volar y hundirnos en el infierno
destrozar nuestros sueños
e inundar de pesadillas la mente.